El té es una planta de origen asiático popular por sus propiedades medicinales. Por tanto, las infusiones de té son muy beneficiosas a la hora de mantener una dieta sana y equilibrada. Sin embargo, no por ello se debe abusar de las mismas. No es recomendable consumir más de tres tazas de té al día.
Seguro que entre las distintas variedades de esta infusión, serás capaz de encontrar el abanico de propiedades que más se adapte a tus necesidades.
- El té rojo, también conocido como té Pu-Erh, es un estupendo quemagrasas y regulador del colesterol, así que resulta ideal para ayudar a eliminar esos kilitos de más. Durante un tiempo fue considerado té de los emperadores, ya que eran los únicos que tenían permitido su consumo.
- Otra variedad muy beneficiosa para controlar el peso, y de paso, el sistema digestivo, es el té negro. Por sus características se convierte en una infusión muy saludable para el estómago, además de ser un poderoso saciante.
- El té blanco se compone a partir de los brotes más tiernos y jóvenes. Y como no podía ser de otra forma, esto potencia sus cualidades antioxidantes, lo que la convierten en una infusión rejuvenecedora, considerada una especie de elixir. Resulta uno de los más exquisitos, y por tanto, su precio es el más elevado.
- El más popularizado por sus innumerables beneficios para la salud, es el té verde. Antioxidante, depurativo, digestivo, pero sobre todo, fortalece el sistema inmunológico, lo que le convierte en un eficiente escudo contra las enfermedades.
- El té azul o té oolong es, a día de hoy, un gran desconocido, aunque su popularidad crece por momentos por ser considerado muy beneficioso para el sistema inmunológico y habérsele descubierto propiedades quemagrasas.
- Y para aquellos que huyen de la teína, el rooibos es su eterno sucedáneo. Mantiene muchas de las propiedades más beneficiosas del té con su alto contenido en vitaminas y sus propiedades digestivas, y además funciona como relajante, al no contener estimulantes.
Pero los beneficios del té no terminan aquí. Esta planta no se destina únicamente a la producción de infusiones, sino que otro de sus usos es el aceite de árbol de té. Sus propiedades lo convierten en una loción muy recomendable ante problemas dermatológicos como el acné. Además de entrar a formar parte en el conjunto de los antivirales por su apoyo al sistema inmunológico y resultar un gran cicatrizante, e incluso muy efectivo en la lucha contra los odiosos piojos.
Pilar López
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