Las musas siempre han inspirado a los artistas. Desde aquellos poetas griegos que clamaban "canta oh musa", pasando por la mujer etérea de Bécquer, hasta las musas de la moda moderna. La musa es siempre una figura femenina. Se trata de una mujer que irradia belleza y pasión. Ella está velada y envuelta por un aura de misterio e idealismo. Encarna un ideal, la idea sublime de la perfección y el arte. Por ello muchas musas son abstractas como la de Bécquer, pero otras son de carne y hueso ¿Qué convierte a una mujer real en la musa de un artista? Para responder esta pregunta fijemos la mirada en algunas musas contemporáneas de la moda.
Loulou de la Falaise, la famosísima diseñadora de accesorios y musa de Yves Saint Larent por tres décadas. Ella cautivó al famoso diseñador con su vibrante personalidad cuando la vio en una fiesta vestida con una túnica. Tal era su estilo único y original. No tenía miedo a lucir distinta. Y lograba cambiar de un estilo a otro conservando su esencia. Basta con ver alguna de sus fotografías, sin importar la edad, para percibir su carácter irreverente y retador, además de su absoluta elegancia.
Iman fue otra musa de Yves Saint Laurent. Él la describió como su mujer soñada (vogue.es, modapedia, "Iman"). Tiene su propia línea de moda, accesorios y cosméticos. Asimismo es autora de dos libros. Fue una de las primeras súper-modelos africanas y abrió la puerta a las modelos no occidentales y de color. Su figura transpira sofisticación y su porte es exquisito.
Observemos ahora a una musa nueva: Coco Brandolini. Es la hermana de Bianca Brandolini. Ella ha inspirado y colaborado con Dolce &Gabbana para su colección de Alta Moda. Domenico la admira por su elegancia atemporal que se remonta a las mujeres de otro tiempo (vogue.es, "Musas reales") Actualmente también trabaja como asesora de moda para Nina Ricci, Bottega Veneta y Alberta Ferretti.
Vogue UK |
¿Qué tienen en común estás mujeres? No es sólo su belleza y elegancia. Se trata de un talento creador. No son maniquies, son personas capaces de crear y transmitir sus emociones, ideas y visión a través de su trabajo e imagen. Toman riesgos, no se conforman con las tendencias, sino que imponen su individualidad. La fortaleza de su caracter renovador se transmite a través de sus fotografías. Nos motivan a cambiar nuestra realidad a través del arte: este es el verdadero sentido de la moda.
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