San Valentín está a la vuelta de la esquina y como sabemos que la relación perfecta no existe y a veces no es tan sencillo sentirte plena y feliz con tu pareja, te traemos unos buenos consejos para ayudarte.
Cada uno debe tener sus propios intereses y metas. Si uno de los dos está desempleado o se siente frustrado, su compañero tendrá la presión de hacerlo sentir feliz. Pronto, la persona que sirve como soporte se sentirá agotada. Una pareja no hace milagros, cada uno debe procurar buscar un hobbie, una ocupación, un empleo y/o una vocación para sentirse motivado.
Y no sólo deben tener sus propios intereses, también sus propios amigos y su tiempo para estar solos. Al principio es normal querer hablar todo el tiempo y verse a diario, pero con el tiempo es importante poder disfrutar del propio espacio sin que la otra persona se sienta ofendida o rechazada.
Tener la libertad de decir cómo se sienten, lo que los hace felices y lo que los incómoda es vital. Es común callar para evitar una pelea pero no hay que temer los conflictos. Quizá discutan pero podrán arreglarlo y seguir. Por el contrario, si guardan silencio, el problema irá creciendo y después será muy difícil o imposible arreglarlo.
Para salir victorioso de una discusión es necesario tener en mente la manera en que decimos lo que pensamos. Si te sientes muy molesto, es probable que seas hiriente y grosero. Lo mejor es dejar pasar un tiempo para tranquilizarte y pensar mejor por qué estás enojado y qué decir.
Al discutir un problema, trata de proponer soluciones y no sólo reclamar. No es lo mismo decir: me aburre que siempre digas lo mismo; a decir: quisiera que pudiéramos hablar de más cosas como...
Ojos que no ven corazón que no siente. Aunque estén muy ocupados tómense un tiempo para compartir a solas. No sólo para tener intimidad, también para cenar juntos, ver una película o alguna otra actividad que los acerque.
Controla los celos. Es muy complicado no sentir celos pero provocan mucha angustia y enojo, incluso agresiones. Si uno de ustedes es muy celoso, o los dos, pueden tomar algunas medidas, como eliminarse de Facebook para evitar acoso virtual o incluso pensar en tomar una terapia si el problema es muy fuerte.
Eviten la rutina. Hay muchos lugares y planes distintos para probar. Busquen nuevas maneras de hacer las cosas, tengan detalles diferentes. Así ninguno de los dos buscara nuevas emociones fuera de la relación. No quiere decir que siempre van a estar igual de entusiasmados como cuando empezaron a salir; pero si la relación es buena, cada día se querrán más.
La idea es que seas feliz, aléjate de relaciones destructivas que no te hacen sentir valorado y amado.
¡Cuídate y disfruta este San Valentín al máximo!
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