Aiko es un cuerpo lleno de silicona y para sus creadores es la compañera ideal: dulce, sumisa, siempre lista para tener sexo o limpiar los platos. Aiko es un robot que sabe hacer un millón de cosas como hablar ingles o japonés, leer en voz alta, distinguir colores y caras familiares, sonreír, pestañar, saber si llueve o hace sol. Aiko que significa “bien querida” en vietnamés, es la “novia” de Le Trung un geek canadiense de origen vietnamés. Siempre ha deseado crear una mujer robot. Si Le Trung es un precursor sin embargo, esta fantasía no es algo nuevo, nos acordemos todos de la película The Stepford Wives (Mujeres perfectas) con Nicole Kidman (una ciudad en donde los hombres transforman sus mujeres en robots).
La industria de la muñeca-robot es en plena expansión desde hace un tiempo.
Algunos años atrás Matt McMulln, fabricante de monstruos en latex para Hollywood, concibió un prototipo de muñecas hiperrealistas en silicona. A pesar de su precio elevado de 8000 dólares, la Real Doll fue un éxito. Hombres tímidos o acomplejados se alegraron de poder tener a la amante ideal. En Japón las empresas de fabricación de muñecas con tamaño real se multiplican. El negocio Doll No Mori se creó. El concepto era como un prostíbulo en donde el cliente elegía su modelo para satisfacer sus necesidades pero muy rápidamente los clientes se aburrieron de estas muñecas-objetos frías como hielos que no se movían ni un pelo. Lo que siguió fue más interesante, ya que en Nuremberg, un ingeniero invento el First Android, un muñeca dotada a la vez de un sistema circulatorio que hace que sea tibia al tocarla, también unos movimientos del tórax dan la ilusión de la respiración, y es capaz de responder a las estimulaciones sexuales moviendo las caderas. En New Jersey, la sociedad The Companion comercializa Roxxxy, presentada como el primer autentico robot sexual. No sabe moverse sola todavía pero puede hablar e interactuar con su dueño gracias a cinco personalidades diferentes que se pueden descargar online.
Algunos científicos piensan que la generalización de esos robots pondrá fin al tráfico de seres humanos y que el trabajo de sexo mecanizado suprimirá criminalidad y enfermedades sexuales transmisibles. Pero el desarrollo de estas maquinas va mas allá que el lado sexual. En los laboratorios de robótica e inteligencia artificial del mundo entero, los científicos conciben criaturas con posibilidades de acción y expresiones impresionantes que hacen que ya se pueden confundir con seres humanos. Expertos en psicología estudian cuales podrían ser las relaciones emocionales entre humanos y robots.
Algunos van mas allá todavía pensando que para 2050, humanos y robots se casarían juntos. Lo comparan a algunos cambios en los hábitos que ocurrieron en el pasado como cuando antes las bodas interraciales estaban prohibidas tal como las bodas entre personas del mismo sexo.
El único peligro que llama la atención de este concepto para mi es el pensar que, al ser robot dotados de un sistema de programación, alguien pueden hackear su software y modificarlo para que no haga sus tareas iniciales sino que otras cosas que podrían ser toxicas, mal intencionadas y nefastas para los humanos. ¿Qué nadie ha visto Terminator?
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