El blanco será definitivamente uno de los colores de la próxima temporada. A pesar del protagonismo que suelen tomar normalmente los colores pastel o los más llamativos (como el naranja), el blanco no se quedará atrás. Los últimos desfiles de moda así lo demuestran.
Por supuesto, no podrán faltar en nuestros armarios el típico vestido blanco de verano, siempre versátil y cómodo. Podemos combinarlo con accesorios en distintos colores, aunque los preferidos suelen ser los negros, marrones o plateados.
Para cuando haga menos calor, optaremos por otras prendas blancas, como blusas y pantalones, que nos aportarán un aire fresco y distinguido.
¿Os apuntaréis al look total white?
Marta Pérez García
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