Soraya comenzó su concierto con Dreamer, uno de los singles de su último trabajo que más la esta haciendo sonar, la cantante dio un repaso a los temas de su último disco pero también canto temas de sus anteriores álbumes. Los singles que la llevaron a la fama desde el comienzo de su carrera musical, temas propios como un popurrí donde nos mostró parte de sus dos discos versionando canciones de los años ochenta.
Ella iba vestida de Mayka Ayong, que es la encargada de todo el vestuario que lleva la cantante en su gira, un vestuario que sigue las tendencias, muy a la moda, fresco y original, con ese punto necesario de teatralidad para derrochar todo el glamour que debe tener una cantante. Los colores flúor son los predominantes en el vestuario de esta gira y en este concierto la vimos luciendo un conjunto naranja con dos lineas negras que lo recorrían de arriba a abajo.
Este fue un look de una verdadera estrella de la música y es que, a pesar del frío, ella mantuvo el conjunto luciendo piernas y unos tacones de infarto que no le impidieron para nada bailar, saltar y hacer enfervorecer al público solo como una verdadera estrella sabe hacerlo. Y ya para acabar de completar una gran actuación cuatro bailarines acompañaron a una Soraya que no dejo de moverse en todo momento e irradiaba una energía que ya quisieran muchos artistas; y es que cuando un cantante disfruta lo que hace el público lo disfruta aún más.
Los temas que más furor causaron fueron Dreamer, I Believe (tema que forma parte de la banda sonora de Mirror, Mirror), Fruto Prohibido con las voces enlatadas de Santa Fe, Give You Up, tema que le compuso Juan Magan, y los tres temas que compuso junto a la extremeña el Dj francés Antoine Clamaran, Live Your Dreams, Stick Shift y Feeling You. Con todas la canciones el público bailo y se entrego por entero, pero con la canción final la energía subió a lo más alto. Mi Mundo Sin Ti, fue el tema que puso fin a un concierto de una hora y media en el que contó con David Pop, el Dj oficial de su gira, y en el que ella se emocionó un poco, pues este fue su primer single y el que le abrió las puertas de su carrera musical.
Tras el concierto Soraya de dirigió al vallado que separaba al público del escenario para saludar a los fans, a pesar de que como ella misma dijo estaba muerta de frío. Es en estos pequeños detalles donde se ve la calidad humana de los artistas y de que saben a quienes le deben su éxito. Afortunadamente Soaraya me dio la mano, dos besos y habló un poco conmigo preguntándome que si me había gustado el concierto, cosa que hizo con otras muchas personas demostrando que se debe a su público y haciendo felices, a los que como yo, la admiramos y disfrutamos tanto de su música.
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