Este personalmente es uno de mis looks favoritos. Con él, conseguimos una mirada profunda, elegante, casi enigmática.
Lo importante de este maquillaje es difuminar bien todos los cambios de tonos de las sombra intentando no dejar ningún corte visible entre tono y tono. Para ello tenéis que utilizar las brochas adecuadas para difuminar, un poco de paciencia y ya veréis como conseguiréis unos ojos preciosos que consigue hipnotizar a cualquiera.
Lo que más me llama la atención de estas sombras es lo fácil que son de trabajar. Aparte de su durabilidad que es excelente, aún sin utilizar prebases, su aplicación es muy versátil. Las puedes utilizar en seco consiguiendo unos colores más suaves apropiados para el día a día, o utilizarlas mojadas (con un poco de agua termal o bien con un poco de agua) para dar un poco más de intensidad.
No olvidéis también utilizar el lápiz en granate para hacer el delineado superior, muy pegado a las pestañas, y en las inferiores sólo hasta la mitad del ojo (si no tenéis este tono, podéis usar el tono 1 del cuarteto; recomiendo usarlo mojado para potenciar el color). Aplicad también el lápiz en la línea de agua inferior porque como sabéis es una buena opción para profundizar la mirada. A todas las que tengáis los ojos pequeños, evitad este paso.
¡Venga! ¿A qué esperáis? A seguir probando que todavía viene lo mejor.
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