Os presento una deconstrución del marmitako, al estilo de la que Adriá hace de la tortilla de patatas, para que resultase un plato más fresco pero con todo el sabor del tradicional guiso, con sus patatas, sus granos de pimienta, su pimiento, su tomate y ese bonito en su punto. Una manera de comer marmitako más fresca y que entusiasmara a nuestros invitados.
Marmitako deconstruido
Ingredientes:
Bonito de Burela sin piel ni espinas
patatas
tomate
dientes de ajo
romero fresco
granos de pimienta negra
aceite oliva virgen extra
pimientos verdes ( use de arnoia)
pimienta negra recien molida
perejil picado.
Preparación:
Confitamos las patatas: cortamos las patatas peladas en cuadrados de un cm de grosor y procuramos que sean todas iguales. En un cazo ponemos aceite de oliva virgen extra, unos granos de pimienta, unos dientes de ajo, una rama de romero fresco.
Ponemos a fuego bajo y cuando este caliente echamos las patatas, dejamos que se cocinen a fuego bajo procurando que no hierva el aceite. Entre 10 y 15 minutos según tamaño de las patatas y grosor, una vez listas retiramos y reservamos el aceite.
Tomate: pelamos el tomate y cortamos en cuadrados de un cm de grosor y procurando que sea del mismo tamaño que las patatas, reservamos.
Bonito: cortamos el bonito en trozos de un cm de grosor. Ponemos a calentar el aceite que usamos para confitar las patatas y cuando este caliente echamos el bonito y retiramos del fuego. Dejamos un minuto y sacamos el bonito, si lo hacemos más tiempo nos quedaria seco.
Crema de pimientos verdes: cortamos los pimientos verdes y los freimos en un poco de aceite con una pizca de sal, una vez fritos los trituramos con la batidora hasta obtener una crema de pimientos.
Montamos el marmitako: ponemos un trozo de patata, encima un trozo de tomate, encima de este un trozo del bonito confitado y echamos un poco de crema de pimientos por encima, le clavamos un pincho.
Colocamos en el plato y espolvoreamos por encima con un poco de perejil picado y pimienta negra recien molida.
Y listo para servir.
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